La Reflexión N.º
329. Se titula: “ Recuerdos” que pueden dañar al creyente. Parte
2da.
Amable lector:
continuamos con esta Reflexión muy importante, que como hemos
comenzado en la anterior trata de los ataques satánicos que podrían
vulnerar al creyente.
Nuestra mente tiene
tanta importancia que nuestro Señor Jesucristo le hizo decir a un
intérprete de la ley, que lo quería probar, o sea buscaba algo para
acusarlo, el primer mandamiento de la ley de Dios, citaré: “
San Lucas 10: 25-28
25 Y he aquí un
intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿
Haciendo qué cosa heredaré la vida eterna?
26 Él le dijo: ¿
qué está escrito en la ley? ¿ Cómo lees?
27 Aquél,
respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y
con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a
tu prójimo como a ti mismo.
28 Y le dijo:
Bien has respondido; haz esto , y vivirás.”
Distinguido lector: nuestro Señor Jesucristo vino para perdón de
los pecados de todos aquellos que lo acepten por propia voluntad, sin
presiones, no por tener un pariente en un templo, sino por decisión
personal. Vino y estableció un nuevo pacto.
Escrito
está en: “ Hebreos 8: 10- 13./// 10 Por lo cual, este es
el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días,
dice el Señor: Pondré mis leyes en la mente de ellos, y sobre su
corazón las escribiré; y seré a ellos por Dios, y ellos me serán
a mí por pueblo:
11 y ninguno
enseñará a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce
al Señor; Porque todos me conocerán, Desde el menor hasta el mayor
de ellos.
12 Porque seré
propicio a sus injusticias, y nunca más me acordaré de sus pecados
y sus iniquidades
13 Al decir:
Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y
se envejece, está próximo a desaparecer.”
Estimado lector: nuevamente haré mención del versículo 10, sobre
la mente y el corazón, como centro de nuestros sentimientos. Tenemos
la gracia, la oportunidad de ganar la vida eterna, solo debemos
hacerle caso al Señor, serle fiel, esforzados y valientes para no
pecar, o sea no desobedecerlo. Quiero compartir una última porción
de la Santa Biblia, para que todos la tengamos presente en nuestras
vidas. Fue el momento que los escribas y fariseos llevaron ante la
presencia del Señor a una mujer adúltera, que la habían
sorprendido en el mismo acto, para ver que decía Él.
Según
la ley antigua debería ser apedreada hasta morir, mas Él nos enseña
que hay que hay perdón y misericordia ante su sagrada presencia. “
San Juan 8: 1-11. /// 1 Y Jesús se fue al monte de los Olivos./// 2
y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y
sentado él, les enseñaba./// 3 Entonces los escribas y fariseos le
trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio,
/// 4 le dijeron: Maestro esta mujer ha sido sorprendida en el acto
mismo de adulterio./// 5 Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a
tales mujeres. Tú, pues, ¿ qué dices?
6 Mas esto decían
tentándole, para poder acusarle.. Pero Jesús, inclinado hacia el
suelo, escribía en tierra con el dedo./// 7 Y como insistieran en
preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin
pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella./// 8 E
inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en
tierra./// Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia,
salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los
postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.///
10 Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le
dijo: Mujer, ¿ dónde están los que te acusaban? ¿ Ninguno te
condenó?/// 11 Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo:
Ni yo te condeno; vete, y no peques más.”
Apreciado:
mi sentir es que si usted está siendo atacado por “ sus recuerdos
de pecados”,
ponga en práctica todo lo que compartimos en esta humilde Reflexión,
y si no aceptó al Señor en su corazón lo haga, y allí comenzará
todo lo bueno para usted. Para finalizar le dejo un versículo para
meditar:
“ San Mateo 5:8
Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
Que el Señor lo bendiga abundantemente, un amigo en el Señor. Si
desea saber más deje su mensaje al 1134012867