TEMA 59. EL ATAQUE DE ANIMALES DOMÉSTICOS A PERSONAS. SEGUNDA PARTE

La Reflexión para este día es la parte segunda de: El ataque de animales domésticos a personas.
28. “Cuando llegó a orilla de la tierra de los gadarenos, vinieron a su encuentro dos endemoniados que salían de los sepulcros, feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.
29. Y clamaron diciendo: ¿Qué tienes contra nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?
30. Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos.
31. Y los demonios le rogaban diciendo: Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos; y he aquí, todo el hato de cerdos se precipitó en el mar por un despeñadero y perecieron en las aguas”.
Amable oyente: la Santa Biblia fue bien clara en enseñarnos que sí es posible que los espíritus inmundos puedan entrar en cuerpos de animales. Es por eso que deberemos estar en concordancia con el Señor Jesucristo, para que nada malo nos pase, para que seamos protegidos y también nuestros bienes y nuestros animales. Que seamos obedientes a la voz de Dios para de esa manera obtener las bendiciones propias de un hijo de Dios. Busque al Señor de todo su corazón. De esa manera no tendrá que temer ningún ataque traicionero del diablo a través de animales o de lo que sea. Y para finalizar, quiero dejarle Deuteronomio CP. 28:1-6
1. “Acontecerá que si oyeres la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra.
2. Y vendrán sobre ti  todas las bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.
3. Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo.
4. Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas.
5. Benditas serán tus canastas y tu artesa de amasar.
6. Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir”.
Que el Señor lo bendiga abundantemente. Un amigo en el Señor.