TEMA 66. ¿DEBO ESFORZARME?

La Reflexión: en esta oportunidad me referiré a aquellas personas que buscan una salida, una solución a sus problemas y creen que una vez que entregaron su vida al Señor Jesucristo, no deben hacer más nada. Que todo vendrá del cielo, que El Señor les hará todo lo que necesiten, que como Dios sabe todas las cosas tiene obligación de solucionarle todos sus problemas. Nada tan errado. La Santa Biblia que es la Palabra de Dios, nos enseña claramente cómo quiere El Señor que se hagan las cosas. Existen muchos pasajes Bíblicos en donde se exhorta a que nos esforcemos.
En esta ocasión citaré el Libro de Josué Cap. 1:5-7 y 9. Pero antes haré una breve explicación sobre estos versículos. Moisés ya había muerto y el sucesor fue Josué, puesto por El Señor. Como todos sabemos, Dios es Todopoderoso y si El quisiera nos daría todo lo que pudiéramos necesitar, sin nuestro esfuerzo. Pero no es esta la manera. Paso a citar los versículos, en donde el Señor le dice a Josué: 5. “Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.
6. Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos.
7. Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.
9. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”.
Amable lector: usted pudo ver que El Señor nos pide que nos esforcemos, que seamos valientes, para que podamos vencer y ser bendecidos por Él. A Josué le había prometido victoria, porque Él estaría con él. Mas la condición era que fuese esforzado y valiente. Hoy en día es lo mismo. Una vez que entregamos nuestro corazón para El Señor, debemos luchar con todas nuestras fuerzas por nuestra liberación total, en todas las áreas de nuestra vida, cumplir con sus mandamientos y estatutos, por amor a Él.
Josué luchó y derrotó a sus enemigos y tomó posesión de la tierra prometida.
Nosotros debemos luchar contra todas las tentaciones del maligno, vencerlo en el Nombre Poderoso del Señor Jesucristo, y así en Fé y en continua lucha, tendremos acceso a las moradas preparadas por nuestro Señor Jesucristo.
San Juan 14:2, dice: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, Yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros”.
Que el señor lo bendiga abundantemente. Un amigo en el Señor.